Nacido en una familia de clase alta, desde niño fue educado para seguir estrictamente su culto religioso. Por ello, cursó estudios en filosofía, teología, psicología y psiquiatría, así como en el aprendizaje de lenguas antiguas. Ahí conoció un estudiante del extranjero y aunque se hicieron muy buenos amigos, tenían diferentes puntos de vista sobre sus teorías. Pero entonces le currió una tragedia familiar, y tras ser acusado de asesinato, es encarcelado a pesar de su inocencia, perdiendo toda fe.
Durante su confinamiento aprendió técnicas de exorcismo del predicador de la cárcel, y se entrenó duramente, fortaleciendo su cuerpo en gran medida. Durante los largos años que pasó en prisión, recobró su fe en la religión. Después de que su inocencia fuera probada, fue puesto en libertad.
Ahora su tarea es la de ayudar a la gente, y para ello viaja hasta América, a Sunshine City, donde echa una mano a las personas desplazadas por el éxodo de L.A. Ahí conoce a Oni y a Cassandra, y preocupado por la situación de Oni y de acuerdo con lo que ha aprendido, llega a la conclusión de que ambos tienen un espíritu maligno. Después de que ambos jóvenes huyan, Elías realiza una larga búsqueda para encontrarlos, pero los chicos simplemente desaparecen en los barrios bajos de Sunshine City. Seguidamente vuelve a Inglaterra, donde le piden que atienda a una paciente. Es entonces cuando tiene otro encuentro con un espíritu maligno, pero esta vez en el cuerpo de una pequeña niña llamada Alice.
Con la pequeña Alice, Elías sabe que se le ha encomendado una nueva tarea. Así que sus pensamientos y sabiduría se centran en la niña. Tras ser trasladada a un hospital de investigaciones en América, Elías la sigue. Es ahí cuando el estado de Alice empeora, siendo incapaz de controlar el espíritu maligno que ha despertado, escapando finalmente del hospital. Únicamente Elías es capaz de calmarla y de controlar ese espíritu.
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(cerca del rival)
(sólo te puedes cubrir de pie)
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(recupera vitalidad)
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