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Tras la finalización de Rage of the Dragons, se hizo balance de la situación. Volvían a estar en Ciudad de Mexico, y financieramente el momento no era halagüeño en ningún caso. Las ventas del juego en occidente no habían sido lo altas que habrían deseado, pero se podía seguir explotando el universo ROTD e incluso ir más allá: seguir como subcontratados de SNK. Si encontraban nuevos contratos en el género arcade, se podría mantener a flote la empresa y por supuesto, hacerla crecer. A fin de cuentas era mucho el trabajo realizado hasta el momento entre creatividad y diseño de videojuegos. Tenían experiencia en el sector, eran competitivos y tenían muchas ganas de crear más videojuegos. Llegaba el momento de dar el paso hacia un nuevo proyecto.

A partir de ese momento, fueron muchas las opciones que barajó EVOGA Entertainment para seguir con su actividad, siempre pensando en desarrollar más videojuegos. Una vez acabado, se dio una rápida salida de los trabajadores de las oficinas en Osaka, incluso sorprendiendo a algunos de ellos por la velocidad en la que se desarrollaba todo ese proceso. Una vez en Mexico, iniciaron las negociaciones con SNK para poder seguir con su relación laboral, destacando entre otras la de llevar a cabo un port de Rage of the Dragons a Playstation 2, aunque finalmente no se pudo llevar a cabo.

También comenzaron a desarrollar arte conceptual para Rage of the Dragons 2, así como un para juego de fútbol y otro de baloncesto. Respecto a éste último, se consiguieron obtener en unas primeras negociaciones, las licencias para poder incluir a Terry, Yuri y Blue Mary por una parte, y a Brian Battler, Heavy D. y Lucky por otra, como jugadores de equipos, en partidos de 3 contra 3. El proyecto se quedó en un nivel conceptual avanzado, sobre un 80% de su desarrollo. Algo igual ocurrió con otro proyecto para un juego de plataformas llamado Geometrics, el cual fue el centro de atención para algunos directivos relacionados con la saga KOF. Se presentaron ideas acerca de la jugabilidad, el mapeado etc, pero desgraciadamente todo ese esfuerzo no obtuvo la recompensa de poder ser llevado a algo material.

No obstante, la influencia dejada por los chicos de EVOGA en SNK no acabó ahí. En 2003, SNK presentaba el juego de lucha Matrimelee, programado por Noise Factory. Como personajes desbloqueables el título incluía alguno de los luchadores de Rage of the Dragons, concretamente Jones, Elías, Jimmy y Lynn. Su sorpresa fue enorme, nada menos que cuatro luchadores ideados por ellos, en otro juego de Neo Geo...

Se sintieron muy orgullosos de que su trabajo hubiese agradado tanto a los de Osaka, aunque también algo extrañados, ya que a pesar con que contaban con los derechos exclusivos de los diseños de los personajes, no se había negociado nada, ni se les había informado al respecto. Sin embargo, lejos de pensar en interponer una demanda por derechos de autor o vulneración de copyright, decidieron no hacer nada para que las cosas siguieran su curso, simplemente por el respeto que guardan al staff de Noise.

En 2004, acuciados por problemas financieros, deciden cerrar EVOGA. Sin embargo el camino no llegaba a su fin, pues varios de sus integrantes seguirían involucrados en la creación de videojuegos. Con una industria arcade en declive y cada vez más orientada hacia el terreno del casino, crearon juegos de pachinko, de pocket, black jack etc, para el mercado mexicano. En este sentido destaca la empresa Fire Token, creada por algunos ex-empleados y orientada exclusivamente hacia los juegos de azar, con dos creaciones fundamentales: Real 3D Black Jack y Real 3D Pocker.

Por otra parte en 2015 estuvieron a punto de lanzar una versión actualizada de Rage of the Dragons para plataformas actuales, algo que los propios integrantes de EVOGA se tomaron muy en serio, pues desde su creación pensaban que podían pulirse ciertos detalles para convertirlo en un juego más entretenido si cabe. Estuvieron negociando nuevos backgrounds, inclusión de extras, etc. Sin embargo este proceso coincidió en el tiempo con la compra de SNK Playmore por parte de un joint-venture formado por varias compañías chinas, cambiando la idea de negocio hacia las consolas de nueva generación, y deteniéndose las negociaciones en seco y quedando todo en standby.

A día de hoy los integrantes de la extinta EVOGA no han dejado de seguir trabajando en proyectos, planteándose nuevas metas, y siguiendo en el desarrollo conceptual de varias ideas que pronto podrán plasmarse en proyectos de envergadura.