|
Zupapa! |
Género |
SSP |
Número de fases |
10 mundos |
Niveles de dificultad |
8 |
Jugadores |
1 - 2 |
Continues |
infinitos |
Duración de la partida |
50 minutos |
Memory Card |
Sí |
Trucos |
No |
|
|
-
Hay videojuegos que propulsaron algún estilo o género en concreto en un momento dado. Nombres como Wolfesntein 3D, Pac-Man, Space Invaders o Snow Brothers, entraron por la puerta grande y son auténticos pesos pesados en la historia de los videojuegos.
En cuanto a este último ejemplo, Snow Bros (Toaplan, 1990), inició nada menos que una nueva manera de entender el género de plataformas, y que consistía en acabar con todos los enemigos dentro de un escenario limitado por los márgenes de la pantalla. Fueron muchos los juegos que intentaron superarlo, aunque muy pocos aportaron nuevas ideas que valieran la pena. Algunos funcionaron, otros no. El fantástico Zupapa! consiguió el objetivo de ofrecer algo nuevo en este género tan explotado, y desde sus gráficos hasta su jugabilidad, nos aporta algunas características que no encontramos en otros títulos.
El argumento es bien sencillo. Nuestro queridísimo dragoncito debe superar una serie de mundos divididos a su vez en un número determinado de niveles, y debe limpiarlos de enemigos que no dudarán en atacar sin tregua. Recibirá la ayuda inestimable de sus simpáticos hijitos, los cuales podremos utilizar como arma arrojadiza y así vencer con más facilidad.
|
|
|
|
|
|
-
Es tremendamente colorista, con unos escenarios muy bien dibujados, lo que le da al juego ese carácter alegre e infantil, tan acorde con la temática.
Los escenarios han sido trabajados de tal manera que cada mundo a visitar no tendrá nada que ver con los demás, y tanto el decorado como los sprites guardarán relación con esa temática en particular. Además son muy variadas unas de otras: la prehistoria, un parque de atracciones, mundo de pesadilla, etc.
En cada ocasión que superemos el nivel podremos ver la siguiente imagen de fondo que guardará relación con el mundo en si. Tanto los enemigos de la pantalla como el final boss de cada mundo guardarán también esa relación, y a esa diversidad tenemos que añadir unos diseños diferentes en cuanto a los ataques de los enemigos.
|
|
-
El personaje principal está muy bien caracterizado, y enseguida el jugador podrá sentir una cierta simpatía hacia el o hacia sus “réplicas” (se sobreentiende que los pequeños dragoncitos son los hijos) y aquí es donde encontramos un excelente trabajo en las animaciones de los pequeños personajes, ya que durante la partida podremos observar cómo se comportan de manera diferente: pueden estar caminando lentamente, pueden correr, hacer juegos malabares u otras acciones que no queremos desvelar, pero todas ellas se caracterizarán por tener un toque cómico que además tendrá su efecto en la jugabilidad.
|
|
|
|
|
-
El sonido es excepcionalmente animado, y sorprende que para un juego de este estilo podamos escuchar unas músicas techno de ritmo tan potente. Desde luego no llegan a tener el carisma de otras melodías escuchadas en el sistema, pero están a la altura de lo esperado.
Los efectos de sonido son variados pero no excesivos, ya que no necesita demasiados para poder ser jugado satisfactoriamente. Eso si, todos ellos tendrán esa ambientación infantil y amable característica.
|
|
|
|
|
|
|
-
Es su punto fuerte, ya que se han sabido ajustar y mezclar todos los aspectos jugables posibles, convirtiéndolo en un título sumamente adictivo. La mecánica es fácil y conocido por todos los fans de este género: vamos a tener que superar una serie de mundos (seis más otros cuatro de dificultad elevada) divididos a su vez en subniveles. Para pasar un nivel tan sólo debemos acabar con todos los enemigos que se encuentran merodeando en el.
Para acabar con ellos, nuestro dragón dispone de sus propios puños y así dejar fuera de combate a los enemigos, pero también contará con la ayuda de sus inseparables dragoncitos, los cuales podrá utilizar como arma arrojadiza para deshacerse de ellos.
|
|
-
Este sistema nos brinda la posibilidad de poder lanzar todos los dragoncitos sobre un mismo enemigo de manera que al desaparecer, despedirá un aura cuyo tamaño irá en proporción con el número de dragoncitos que se le haya lanzado. Si el aura toca a algún otro enemigo, también morirá pero con el añadido de convertirse en un ítem de bonus, algo que seguramente ansiaremos conseguir ya que cada millón de puntos se nos recompensa con una vida extra. Y si somos capaces de acabar con todos los enemigos de la pantalla con un solo “aurazo”, nos recompensará con un bonus digno de nuestra destreza.
En cuanto a los enemigos, estos van a atacarnos siempre de manera similar (muchas veces de manera más bien pasiva, como las típicas encerronas que sufriremos a manos de varios enemigos a la vez), y en cuanto a los bosses, al tener un diseño personalizado con la temática de su mundo correspondiente, tendrán unos ataques diferentes al resto. De hecho, muchas veces habrá que seguir un patrón diferente para poder derrotarlo. Además en ocasiones podremos entrar en una fase extra de bonus, que consistirá en ir tirando dragoncitos a una campana central, y a medida que la elevemos, nos regalará decenas de ítems de bonus.
|
|
|
|
|
|
-
Nos ofrece horas de pura diversión, pues es capaz de dar entretenimiento a raudales, y de hecho, todo acompaña: unos mundos coloristas, un protagonista simpático, una dificultad ajustada como pocas veces hemos tenido ocasión de probar, y muchísimos niveles a nuestra disposición. Estos son los ingredientes que hacen a Zupapa! especial.
Incluso con el juego superado, sigue teniendo atractivo si nos planteamos nuevos retos: poder conseguir más vidas extra mediante acumulación de bonus, intentar acabar con el mayor número de enemigos posibles mediante el lanzamiento de todos los dragoncitos sobre un mismo enemigo... Muy recomendado.
|
|
|
|
|
|
Lo Mejor |
|
|
|
Lo Peor |
|
- Los cuatro últimos mundos pueden hacerse muy difíciles.
|
|
Alternativas |
|
Es un género no demasiado explotado, de manera que no nos quedan muchas opcines. Tenemos el fantástico Bang Bang Busters y Nightmare in the Dark, dos juegos que no podemos dejar pasar. |
|
|
|
|
|
|
|