Tras un año de retraso respecto a la fecha prevista para su lanzamiento inicial (junio de 1996), finalmente en junio del 97 se pone a la venta (y solamente para el mercado japonés), el único RPG de Samurai Showdown para Neo Geo CD, lanzándose también para PlayStation y Saturn. A pesar de su gran potencial, tendría la mala suerte de haber aparecido justo en el mayor apogeo de la saga Final Fantasy, con Final Fantasy VII lanzado en enero de ese mismo año, quedando tristemente relegado a un segundo plano.

Encontramos un hilo argumental por partida doble, pues podremos jugar dos capítulos independientes que componen el juego: Jyatengorin no Sho y Yokatokoku no Sho, los cuales reflejan parte de la historia contada en Samurai Shodown I y II respectivamente. Una de las características que aleja al juego del resto de RPG's de la época, es que podemos seleccionar nuestro personaje protagonista de entre los seis disponibles (Haohmaru, Galford, Nakoruru, Genjuro, Ukyou y Cham Cham), lo cual le da un carácter rejugable del que carecían otros títulos de este género.

La primera historia nos propone la opción de enfrentarnos contra Amakusa, la representación del mal más conocida en la saga, o bien entrar de lleno en una historia alternativa de dificultad notable, que presenta a un nuevo villano del ya de por sí elevado número de personajes con que cuenta el juego, Mizuki Rashoshin, un monje que tratará por todos los medios resucitar al mismísimo Dios de la Oscuridad.

Aunque carece de cualquier diseño gráfico de última generación de la época (gráficos CG, intro animada, etc), durante la partida seremos testigos del cuidado con el que SNK trató al título, apareciendo en cada momento de la aventura innumerables detalles y localizaciones que consiguen una ambientación entre lo mágico y lo medieval, realmente bien conseguida. Verdes prados y bosques, ríos, los diferentes edificios de la ciudad, tanto fachadas como interiores, templos, zonas montañosas nevadas... es tan amplio el número de escenarios diferentes por los que nos moveremos, que conseguirá mantenernos pegados a la pantalla una hora tras otra.

A pesar de que este nuevo Samurai Shodown salga del género de la lucha, veremos fielmente reproducidos a nuestros personajes favoritos, con movimientos y detalles que nada tienen que envidiar a los títulos originales, mucho más conocidos por el público en general. Es en definitiva un claro ejemplo del buen hacer en cuanto a creación de gráficos en 2D se refiere, consiguiendo impresionar tanto o más que lo que podrían llegar a sentir con muchos otros RPG con gráficos en 3D.

Con unas melodías que siguen dejando el listón tan alto como los primeros Samurai Shodown, este apartado conseguirá meternos aún más en la historia y poder disfrutar del hilo argumental aún con mayor intensidad. Encontraremos muchas melodías basadas en las que ya escuchamos en su momento en los títulos originales, encajando perfectamente en este nuevo género, aunque también las habrán de nueva creación (por ejemplo las que escuchamos durante los periodos de exploración del mapa) muy tranquilas y relajadas al oído.

En cuanto a los efectos de sonido, son muy variados y nos recordarán enormemente a los escuchados en los títulos originales, pero es que además en esta ocasión destacan las voces como elemento añadido que resulta ser todo un atractivo, sobretodo por parte de los fans de la saga. Podremos escuchar a nuestros personajes favoritos decir frases enteras, aunque eso si, únicamente en los diálogos más importantes, siendo los demás únicamente escritos. Pero lo mejor de todo es que SNK utilizó a los mismos seiyu (actores de voz) que en Samurai Shodown I y II, de modo que nos resultará muy interesante escuchar a nuestros personajes favoritos con voces familiares.

El control del personaje no difiere para nada de lo que podríamos encontrar en cualquier otro RPG de estas características. La palanca nos sirve para mover a nuestro personaje, y con los botones podremos hablar, cancelar acción, ir a la pantalla de inicio, atacar o correr.

En la pantalla de opciones podremos elegir qué método de pelea vamos a seguir en los combates de entre los dos disponibles, traduciéndose en que según qué estilo seleccionemos, deberemos realizar determinados movimientos de palanca para realizar un ataque especial determinado. Por cierto, en este juego no encontraremos ataques mágicos como suele ser habitual en el género, sino que los movimientos o ataques especiales harán las veces de ataques con magia. Por ejemplo, Nakoruru podrá curar a algún personaje herido mediante un comando, en lugar de utilizar una poción. Eso si, el uso de estas técnicas especiales consumirán puntos de magia.

La aventura en solitario durará demasiado, pues pronto uniremos fuerzas con otros dos luchadores, consiguiendo un equipo que causará estragos entre los enemigos, con los que podremos recorrer el mundo entero. Deberemos explorar el mapa y los combates serán por turnos, tan de moda en la época con juegos como Final Fantasy VII.

La dificultad no es en absoluto baja, y al poco de empezar a jugar nos recordará a la que podemos encontrar en otros RPG de la vieja escuela, donde el juego se considera en si mismo una prueba de habilidad para superar una serie de peligros con pocos recursos, más que lo que podemos encontrar hoy en día, un sistema en el cual avanzamos sin cesar hasta el ending. Desde un principio sorprende que toda la historia del juego quepa en un solo CD (seis finales alternativos y dos capítulos jugables), pero es que aparte de la inexistencia de secuencias FMV que sumarían megas, el recorrido aunque extenso está bastante contenido, pues deberemos luchar una y otra vez con enemigos difíciles de vencer, a los cuales deberemos derrotar con escasos recursos, dinero o experiencia.

Desgraciadamente no todo reluce, también nos encontraremos con algún que otro punto negativo. El primero de todos, es evidentemente el problema del idioma, pues al presentarse exclusivamente en japonés, está claramente orientado hacia el público nipón, no pudiendo ser disfrutado por jugadores occidentales. Además, cuenta con el añadido de que alterna textos en japonés de tipo silabario o kani, con textos ideográficos o kanji, los cuales pueden resultar de difícil comprensión incluso para aquellos jugadores occidentales con un cierto conocimiento de la escritura kani.

El segundo aspecto negativo que le resta puntos es de sobras conocido en la scene, sus continuas cargas. No solo en el sentido del tiempo que tarden las cargas en realizarse, las cuales por ejemplo para preparar un combate suelen durar entre 5 y 8 segundos, sino la cadencia de cargas durante el juego. Son constantes, y por poner un ejemplo, cada edificio de la ciudad necesita cargar datos. Si entramos en una tienda, el juego necesitará cargar. Si compramos un ítem y salimos, volverá a cargar. Una lástima que no se hiciera nada para solventar este problema, pues dilapida el dinamismo de una acción continuada, cortando constantemente el ritmo.

Estos dos problemas que comentamos van a restarle mucha rejugabilidad. Y no es que carezca de aspectos que le puedan otorgar esto precisamente, puesto que uno de los grandes alicientes que nos ofrece Samurai Shodown RPG es la posibilidad de pasarnos ambos capítulos con cada uno de los seis personajes seleccionables.

Sin embargo, que no podamos entender la historia debido al idioma, así como la presencia de continuas cargas, hará que difícilmente deseemos repetir la historia, o incluso jugar un par de horas, antes de caer en el desánimo. Una lástima estos dos aspectos. Aún así, no se puede negar que SNK hizo un excelente trabajo en los demás aspectos.

No disponibles.