En 1996 parecía que Neo Geo había tocado su techo tecnológico, donde sagas como The King of Fighters o Samurai Shodown, seguían año a año captando adeptos con nuevas entregas. Sin embargo, un pequeño estudio hasta entonces desconocido llamado Nazca Corporation, presenta Metal Slug, un título que se convirtió en éxito mundial desde el primer día de lanzamiento. Hoy en día, preciadísimo objeto de coleccionismo, sigue siendo quizás el más deseado de todo el catálogo.

El argumento nos traslada a un futuro no muy lejano, concretamente a los años 20 del siglo XXI. Estos años han estado fuertemente marcados por el terrorismo internacional de las últimas décadas, y la situación en lugar de ir a mejor, ha empeorado. El mundo tal y como lo conocemos está defendido por el Ejército Regular, unas fuerzas militares bien armadas y entrenadas, que se crearon por los gobiernos tras observar cómo las fuerzas terroristas internacionales se organizaban, creando un ejército propio, La Rebelión, cuyo objetivo era nada menos que desestabilizar en lo posible al sistema mundial y en última instancia, acabar con los gobiernos más poderosos. Los ataques terroristas se sucedieron sobre todo a partir del año 2020, y el Ejército Regular de momento, podía contener la situación.

De entre los oficiales del ejército Regular, destacaba uno en particular, el vicealmirante Donald Morden, el cual empezó sirviendo en el Cuerpo de Marines para poco después acabar en Inteligencia. Era un hombre respetado por todos, y sus hombres confiaban plenamente en el. Sirvió en el Ejército hasta 2023, año en el cual tras un terrible error, el ejército Regular bombardeó por error Central Park, matando a su hijo, tras lo cual juró vengarse de ellos, y decidió unirse a La Rebelión, autoproclamándose general en jefe. Su mano derecha será Allen O’Neil, un veterano soldado fiel al general desde muchos años atrás. Sus armas favoritas son la M60, las granadas y el cuchillo.

A partir de ese momento, La Rebelión deja de ser una organización paramilitar y pasa a ser un ejército real, con hombres bien armados y muy bien entrenados en las artes terroristas, y gracias a su general al mando, Morden, inician una serie de ataques organizados que pondrán las cosas realmente difíciles al Ejército Regular. Entre ellas, la más destacada es el intento de asesinato del Presidente de EEUU, en 2025.

Es en ese momento cuando el Ejército Regular, decide crear una nueva arma que le permitiría plantarle cara a sus enemigos: el tanque especial llamado Super Vehicle-001. Producido en serie, pretendía ser el último recurso del Ejército Regular para frenar el avance de La Rebelión.

Tres años después, en 2028, nos ponemos en manos de dos tenientes, Marco Rossi y Tarma Roving, pertenecientes a un comando de las fuerzas especiales del Ejército Regular, llamados los Halcones Peregrinos, los cuales tras mover unos hilos consiguen que se ponga en marcha una operación secreta que incluirá el uso de estos tanques, con el difícil objetivo de acabar de una vez con el general Morden. La misión, nos llevará por bosques, junglas espesas, ciudades y pueblos infestados de enemigos,  terrenos nevados y desérticos. Se espera una fuerte resistencia enemiga, con lo cual necesitarán de todas sus habilidades para poder regresar con vida.

Gráficamente es soberbio y espectacular en cada metro recorrido por nuestros protagonistas. Los gráficos están tan pulidos en esta primera entrega, que los diseños de efectos, escenarios o sprites seguirán las líneas marcadas por esta primera parte.

La introducción es directa y breve, pero con una animación y sonidos espectaculares, e incitan nada más verla a pulsar el botón .

Una vez en la partida, notaremos que todo ha sido minuciosamente estudiado para conseguir el mayor realismo jamás visto hasta la fecha en un Run and Gun de Neo Geo. Sus fases nos muestran una ambientación bélica que engancha desde el primer momento. También tenemos que destacar el gran trabajo realizado respecto al diseño del recorrido en sí del personaje, pues cada cima, cada plataforma, cada salto, ha sido minuciosamente estudiado para que la aventura no pierda un ápice de diversión o de interés.

Los sprites por su parte han sido cuidados al máximo para darle al título la mejor ambientación bélica, y es que los diseños de personajes y vehículos son al igual que los escenarios, soberbios. Las animaciones son fluidas y realistas. Éstas no sólo se limitan a movimientos de disparo, sino que simularán actividades normales "extra", como durmiendo, comiendo, tomando el sol, asustándose...

En el caso de los vehículos, sus diseños son igualmente espectaculares, no sólo por su realismo, sino por la variedad que iremos encontrando durante la aventura, en especial los bosses, algunos de ellos ya considerados míticos.

Curiosamente y relacionado con diseños de sprites, sorprende que las fuerzas de La Rebelión se basen en el ejército nazi de la II Guerra Mundial, así que no nos extrañe que seamos capaces de distinguir vehículos semiorugas, tanques etc, con un parecido más que razonable a la realidad.

Otro apartado a comentar es el de la violencia visual. Es muy violento, aunque también es cierto que la sangre se censuró tanto en la región USA como en la europea. Pero si podemos tener la ocasión de jugar con sangre roja, invita a no parar de disparar a las fuerzas de La Rebelión.

Por último y siguiendo con el apartado gráfico, destacamos el componente humorístico que nos acompañará a lo largo de toda la aventura. Podremos observar infinidad de veces como si les atacamos por sorpresa, exclamarán y querrán huir despavoridos. Incluso referente a nuestro protagonista, por ejemplo si lo dejamos demasiado tiempo parado sin hacer nada, llegará a llamar por radio, o le saldrá un moco verde de la nariz...Por lo demás, también podremos ver cómo somos atacados por una orca, o cómo un soldado nos intenta aplastar con una bola de nieve.

Se trata de otro aspecto muy trabajado. Las melodías tienen influencia de músicas militares, aunque obviamente se ha variado la temática para adaptarla mejor al juego, con tintes incluso de música jazz. El ritmo será rápido, de tal modo que conseguirá mantenernos en tensión en el fragor de la batalla. Además es de composición muy compleja, es muy difícil de hecho que seamos capaces de tararear de memoria una canción entera.

Las voces son uno de los puntos fuertes, comenzando por la voz en off que informa tanto del título, como de los items que vamos recogiendo durante la partida. “Metal Slug”, “Heavy Machine Gun” o “Rocket Launcher”, entre muchas otras, son algunas de las palabras que se nos quedarán grabadas en la mente. Por lo demás, los gritos de los soldados igualmente estarán muy bien conseguidos, tanto si son gritos de dolor como de espanto al vernos llegar. El resto de efectos de sonidos, explosiones, disparos, fuego, motores, etc, son de lo mejor que ha dado nuestro sistema. Todos ellos son muy reales.

La mecánica no difiere en exceso de otros Run and Gun conocidos. Simplemente se trata de llevar a nuestro protagonista a lo largo de sus seis fases, acabando con todos los efectivos de La Rebelión y liberar al mundo de su opresión. Estos son los controles:

Vamos a contar con la posibilidad de utilizar armas muy diversas que nos pondrán las cosas más fáciles. Eso si, su munición será limitada, no pudiendo malgastarla si no queremos que nos desaparezca en unos segundos. Estas armas se cogerán a modo de ítems que aparecerán durante la partida, fácilmente distinguibles por la inclusión de la inicial del arma en cada uno de ellos.

Además podemos liberar constantemente a prisioneros de guerra que se encuentran desperdigados por todos los niveles, y los cuales nos proporcionarán ítems tales como bonus, armas, etc. Si liberamos esos POW sin perder una vida, al final de la fase nos harán un recuento de todos los que hayamos salvado y así conseguir suculentas cantidades de bonus.

Durante la aventura dispondremos de la inestimable ayuda del Super Vehicle 001. Lo encontraremos en escasas ocasiones durante el juego, pero cuando estemos a los mandos, seremos implacables. Dispondremos de ametralladora infinita, así como un número limitado de proyectiles para el cañón. Tendremos una barra de energía, que hará que nos tengamos de tomar las cosas con calma puesto que tan sólo aguantará tres impactos directos. Una vez que nos alcancen y que el tanque esté a punto de explotar, tendremos tan sólo un par de segundos para abandonarlo si no queremos desaparecer junto a el. Para el jugador más avanzado, puede utilizarse como vehículo kamikaze si se abandona el vehículo a punto de explotar junto a cualquier enemigo.

Lo tiene todo, gráficos y sonidos espectaculares, una jugabilidad que quita el hipo, y diversión a raudales. No es que sea excesivamente largo, pudiendo acabarse en poco más de media hora, pero es tal la variedad de enemigos y de escenarios, tanta acción, que harán que nos enganche partida a partida.

Sentó las bases de esta larga saga, y fue superado técnicamente por las siguientes entregas, pero sigue teniendo los ingredientes necesarios como para volver a él asiduamente.

No disponibles.